Instrumentos para navegar la educación secundaria que soñamos

En Argentina 1 de cada 2 jóvenes no logran obtener el título secundario dentro de la educación común. Clarín - 6 de Marzo de 2021

Nuestro sistema educativo, con algunas excepciones, navega con un déficit de instrumentos de medición de trayectorias escolares que dificulta la toma de decisiones en tiempo real, generando el riesgo que las diferentes intervenciones lleguen tarde a sus destinatarios y que no sepamos a ciencia cierta cuántos estudiantes volverán a la escuela en este nuevo ciclo lectivo.

En Argentina el derecho a recibir y asistir a la educación secundaria es obligatorio. Cómo es sabido, nuestra sociedad no logra cumplir con este derecho. En Argentina 1 de cada 2 jóvenes no logran obtener el título secundario dentro de la educación común.

Nuestro sistema educativo cuenta con dos herramientas que no están siendo empleadas de manera generalizada y que permitirían resolver la falta de indicadores en tiempo real. Estas son el Sistema Integral de Información Digital Educativa (SInIDE) y la Ley Nacional de Cédula Escolar. Ambas políticas, en caso de aplicarse en todo el país, permitirían llevar un registro en tiempo real de las trayectorias escolares y poder segmentar las políticas de intervención a partir de las características de cada caso. Permitiendo impulsar políticas educativas nacionales que vengan a fortalecer las propias de cada jurisdicción. Ya que en la actualidad existe una dispersión entre los sistemas que implementan las provincias siendo solamente algunas pocas las que implementan el SInIDE y una mayoría con un sistema nominal de seguimiento propio. Sin duda esto dificulta la coordinación nacional a través del Consejo Federal de Educación y demora la toma de decisiones.

Si bien es cierto que la suspensión de clases presenciales en el 2020 generó un problema puntual de acceso a la educación secundaria. Nuestra sociedad en líneas generales tiene resuelto este asunto. Es decir, casi el 100% de los estudiantes de la escuela primaria llegan a la secundaria. Pero, solo la mitad logra graduarse efectivamente. La deserción escolar es multi causal: el ingreso temprano y de manera informal al mercado laboral, el bajo capital social que en algunos casos no permite que las familias acompañen la escolaridad de sus hijos, el embarazo adolescente y la falta de motivación que genera el modelo educativo actual.

Sin embargo, nuestra secundaria aún conserva fortalezas y estás deben ser los pilares de la transformación. Que todos los jóvenes lleguen a iniciar la escuela secundaria es de las más significativas. Es fundamental aprovechar al máximo todos los días que los estudiantes, sobre todo de aquellos que sufren derechos vulnerados, estén dentro de la escuela.

Desde Cimientos vemos que fortalecer las trayectorias escolares es un camino muy sólido para lograr que todos los jóvenes puedan terminar la escuela secundaria. Hace 25 años nos especializamos en acompañar trayectorias de jóvenes de poblaciones vulnerables. Lo hacemos mediante una tutoría que trabaja en el desarrollo de habilidades socioemocionales, tales como la autoconfianza, el autoconocimiento y la responsabilidad. El acompañamiento personalizado, además de mejorar el paso por la escuela y el egreso efectivo, permite identificar en tiempo real potenciales riesgos en la escolaridad y ajustar las estrategias de intervención para prevenir la deserción escolar. Cómo organización estamos a disposición para compartir nuestras experiencias, prácticas y resultados con toda la comunidad educativa de nuestro país.

 

LINK A LA NOTA

panedille
peralta-mobile
galicia
roemmers
pamsa
itau-mobile
branca-mobile